Qué ganas de lluvia.

Qué ganas de salir a sentir la lluvia mojando mi cara,
llevándose aquellos malos pensamientos
que de pronto me inundan,
me ahogan, me saturan, me derrumban.

Qué ganas de caminar bajo la lluvia
 y sentir el sonido de su melodía al caer, 
sentir como poco a poco su música me relaja
 y me lleva a dimensiones desconocidas.

Qué ganas de ver cómo el cielo cambia de color 
mientras pasa el momento de la tormenta
y ver que luego de ella todo parece mejor.
Ver como la ciudad va tomando otro color, otro aroma
y como eso va inundando mi ser de paz y armonía.

Qué regalo mas grande, la lluvia...

Qué ganas de que esa lluvia sea tan real en mi ser,
que limpie mi cielo y haga cambiar su color, su sentir y su amanecer.

Cómo anhelaba ver llover..